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martes, 18 de mayo de 2021

ALGUNOS APUNTES ACERCA DE LA INTELIGENCIA ESPIRITUAL

Durante 2019, una gran amiga volvió a conectarme con el pensamiento y las propuestas de Stella Maris Maruso, acercándome y luego regalándome el libro "El laboratorio del alma", el cual recomiendo fervientemente.
En la Fundación Salud, que regentea Stella Maris Maruso , se imparten Seminarios de Inteligencia Emocional y Espiritual desde hace años, dedicados a personas con diagnósticos terminales, enfermedades crónicas, o cualquier tipo de crisis vital.
En junio de 2020 realicé en pandemia mi primer y hasta ahora único Seminario, del que recogí una valiosísima experiencia y aportes que se van integrando de a poco en el día a día.
Ayer, repasando mis apuntes, encontré una ínfima parte de ellos, y deseo compartirlos por si fueran "despertadores" para quien los leyera.
(continuará)

La inteligencia espiritual tiene que ver con el desarrollo de las virtudes, de la sensibilidad y la ampliación de la conciencia.
La transformación se ve en los detalles y en las acciones.
Mostrar lo que de verdad soy.
Sentir: siempre sentir lo que nos pasa.
Todo lo que sucede en el presente afecta al futuro como consecuencia y al pasado como redención.
No soy mi estado sino mi proceso.
Un ritual implica unir dos planos: lo externo con lo interno. Es un puente.
El servicio es el motor de la vida siempre que nazca del corazón
Agradecer lo que tengo y también lo que no tengo y no deseo tener
Agradecer el sí y el no.
Aceptar no es aprobar y no es someterse
Aceptar es ahorrar un gasto energético que hace falta para sanarse
Poner el para qué. Poner la vida en modo oportunidad ante la contrariedad.
Elegir tiene una consecuencia, y ante esa consecuencia tengo que re-elegir.
Cuando se acepta lo peor empieza lo mejor
Hay "despertadores", pero el camino es personal.
Aprender a mirar-nos y a perder el miedo aunque aparezcan cosas que no nos gustan. Ser honestos con nosotros mismos.
Hay cuatro preguntas para anclar en el momento presente: qué estoy haciendo, qué estoy sintiendo, qué estoy pensando y cómo estoy respirando.
Hablar con los demonios que me habitan y mirarlos de frente.
Importancia del mostrarse. Y de la aceptación de lo que me sucede.
Ser oruga consciente. Respetar mi tiempo propio.
O se aprende por conciencia o se aprende por dolor.
Dar desde lo mejor. No dar desde el deber ser.
Tres rejas para hablarle al otro: lo que voy a decir es verdadero? Es necesario? es para sembrar el bien en mí o en el otro?
No hipotecar mi vida: no puedo respirar por el otro aunque lo ame.
No llevar a upa. Acompañar.
Servicio, pero con límites. Decir sí y decir no y viceversa cada vez que corresponda.
Dar al otro lo más sagrado que tengo: mi tiempo de vida. pero hasta un límite: para poder seguir caminando.
Aunque crea todo superado y trabajado, el deseo contrariado siempre tiende a imponerse, y el autoimportantismo.
La biología agradece cada cambio, cada pasito.
Agradecer desde el corazón: la palabra embarra.
TODO LO QUE NO ES AGRADECIDO SERÁ PERDIDO.
Si no se es compasivo se es cruel para con uno mismo.
Si no aprendí de lo que sí tuve y de lo adverso, soy cruel conmigo.
Vivir el aquí y ahora pero desde la conciencia, no desde el hedonismo.
La gratitud transforma: si no transforma, no sirve para nada. Es un mero decir "Gracias"
Los estados emocionales por sí mismos no transforman.
La emoción expandida tiene que ver con los afectos, con el amor expandido por la conciencia.
El golpe al ego es ser purificado para transformarse de veras.
Lo que necesitaré mañana lo construyo hoy y si hoy no tengo eso es porque ayer no lo construí.
No pelear contra lo que está sucediendo ya es colaborar con un mundo mejor.
Agradecimiento a todo. 
Pensar equivale a sentir.
¿Qué siento cuando digo gracias?
Agradecer lo malo que a mí no me está pasando.
Aceptar la diferencia con el otro en lo chiquito.
Mostrarse. no desde los roles. Decir siempre la verdad, y no aferrarse al resultado.
No basta con tener las respuestas, sino que hay que ser transformado por ellas.
La misión es universal: el aprendizaje.
El propósito es personal y único.
Dar información: no guardarse lo que se sabe. Es un servicio.
Dar en alegría, no en automático
Hay indicadores somáticos: por ejemplo, si lo que hacemos nos hace bien.
La vida siempre asume nuestras elecciones.
El guerrero se tira a la pileta sin certezas.
Decir gracias es una cosa, pero es distinto que sentirse agradecido.

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