LLORACIÓN

"fósforo y fósforo en la oscuridad

lágrima y lágrima en la polvareda"

César Vallejo

El lagrimal hoy no trifurca,

sólo acontece, vallejo, sin llorar.

Inflamado de ilusiones ópticas

se ha enrojecido.

Supura, pobrecito,

no puede consigo,

no da abasto de sueños.

Conjuntivitis almosa grave: eso me pasa

por el ojo

por el intestino grueso y el delgado

por el almita sufriente hoy

por el "tiemblo de frío" y el "ahora"

por el "no me creo" y el "después mejor".

Tú me has enseñado muchas cosas

con peruano acento.

Yo he aprendido

que al país de la felicidad se llega pocas veces:

unas con la copa en la mano,

y otras con la copa caída.

Empedazos

la gente construye sus mansiones de sueños

con birome azul sobre papel verde

cree construir una casa, un ala, un pañuelito

y luego espía

y se encuentra con su ausencia,

con su matriz inflada,

con la mano confundida,

con el abismo intacto,

como siempre,

como sin llegar,

como después de haberse despedido.

Por eso el lagrimal hoy no trifurca, césar.

Apenas si bifurca, y ya es bastante...

Indeciso si llora,

indeciso si sueña.

Y apenas si llora,

y a penas se enferma,

de ahí su rojo estado crónico de in - tensidad constante.

Aliviados los que lloren,

porque de ellos será el reino de la paz.

C. Bakún

Este poema, escrito en el 2004, si mal no recuerdo, es un homenaje a César Vallejo, y con él, a todo lo que aún duele en el mundo... en el mundo adentro y en el mundo afuera.
Como dice el poeta Héctor Negro "si es el dolor al fin quien nos iguala/ y la esperanza quien nos ilumina"