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Advierto en mí un anhelo
que se hamaca en el aire desde siempre
como el mar desde siempre
como el agua de un lago
como la Cruz del Sur
como los cielos
De sentarme en orillas con riesgo de tsunamis
de recorrer los bordes
y de caminar
aunque no tenga alas
Un anhelo de peligro advierto
de querer amanecer como a las doce
y ser un cántaro quevayquevá y se rompe
Anhelo lo perdido por los miedos
por los vastos silencios
y los no de los otros
y más noes
Quisiera haber sabido de este impulso de mundo
del aguijón que ardía las costumbres
Haber sabido
que ahí estaba el dolor sentido desde siempre
Como el mar desde siempre
como el aire
de mi primer grito
***
de aquel tiempo
quedó el silencio de los eucaliptos
el pequeño guindo
la tarde de los pájaros
los pies sobre la grama
libros en la mesa
y tantas caminatas escarchadas
quedó la niebla
quedó la niebla de la ruta
los miedos de mi niña
los míos
que el sol se los lleve
que el sol se los lleve
quedaron las tormentas
las grietas en el cielo
el amor sagrado de los teros
las cabras en un techo
de aquel tiempo
quedaron decisiones
y el verbo inventar
que nunca cesa
que el sol no se lo lleve
que el sol no se lo lleve
Muchas gracias Clau, por compartir los poemas en tu blog. Te mando un enorme abrazo!
ResponderEliminary yo a vos otro y las gracias por escribirlos!
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