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domingo, 11 de febrero de 2024
PATERSON
jueves, 25 de enero de 2024
LA SOCIEDAD DE LA NIEVE
Anoche vi la película "La sociedad de la nieve", y ,-atenti que seguramente un poquito voy a espoilear-, me gustó mucho verla, me pareció muy, muy buena, y sobre todo muy enfocada en algo que, -creo yo-, es lo central de todo lo sucedido y de todo lo que se cuenta, y que es ni más ni menos que la vivencia de lo sagrado.
Porque el plus enorme que tiene la historia es que fue real, y que siendo real fue a la vez una tragedia y un milagro. Y a mi forma de sentir la vida, creo que aunque hubiera fracasado en cuanto al rescate, la parte de milagro estaba presente igual.
¿Por qué? Porque justamente lo que ellos hicieron posible a pura fuerza de deseo de vivir, y que se dio ( ser encontrados para seguir viviendo), podría no haberse dado en ese último aspecto (ser encontrados y seguir viviendo) pero sí tuvo un componente que está detallado por lo menos en el relato de tres personajes en distintos momentos, y que tiene que ver con el CÓMO, que es para mí la gran pregunta de la Vida.
Ellos encontraron un cómo sagrado, un cómo en conjunto, en el que todos eran realmente uno, moviéndose como un engranaje amoroso en el que cada uno al cubrir su parte a la vez cubría la de los demás, y en la que cada uno cubría su parte en vida y en muerte físicas. Ese "salvarse" que lograron, fue una tarea sagrada encarada en común hasta las últimas consecuencias.
Es emocionante que eso haya sido cierto, y que haya sido posible como logro humano, en un medio natural bellísimo y adverso hasta la locura.
Cómo pudieron lograr que hasta el hecho de comerse los unos a los otros haya sido tremendo acto de amor y de respeto, una verdadera "comunión" más allá de que alguno la entendiera como Cristo la entendió y otros, desde un lugar diferente.
Una maravilla decidir contar la historia desde ahí, en un momento tan verdaderamente caníbal, despiadado y grosero, en que nadie resiste por más de dos minutos la sensación de vacuidad, no sólo de comida, sino de tiempo ocioso, o de no comprar objetos. Un momento en que todo es relleno, y en que todo es rellenable.
Setenta y un días (creo recordar que fue ese número) para con-mover a este mundo despiadado e impaciente.
Gracias
sábado, 22 de julio de 2023
TIKKUN OLAM
(inspirado en la película “La huella del silencio”)
I
Ella, la hija:
un don de letras y palabras
inocente de designios superiores.
Él se deleitaba
en la contemplación de su hija casi perfecta
Y la Cábala fluía en ese don misterioso,
entre ambos,
en el designio de un Padre para otro padre.
II
Ella, la madre:
juntaba objetos brillantes
pulseras, anillos baratijas
pequeños pedazos de luz
que hurtaba a escondidas en casas ajenas,
como una niña.
Nadie lo había advertido:
ni su brillante esposo
ni la luminosa hija
que era capaz de recordar palabras
al derecho y al revés.
Cuando abrieron la casa secreta,
un sinfín de caireles
centelleó.
“Construí un poema de luz”, dijo
y se volvió loca.
III
Todo estaba perdiéndose para siempre.
Pero la niña prisma
juntó las palabras necesarias
para llegar al oído de dios
ordenar el poema de su madre
y reparar el mundo
viernes, 22 de octubre de 2021
SONATA PARA UN HOMBRE BUENO, o LA VIDA DE LOS OTROS
Esta entrada se basa en la extraordinaria película "La vida de los otros", y aclaro antes que nada que anticipa mucho sobre su argumento, por lo cual cada quién evaluará si leerla antes de ver la película.
Hecha esta aclaración, "La vida de los otros" fue una recomendación que agradeceré siempre. Hace rato que no veía algo que me conmoviera tanto. Una obra maestra, una "Sonata para un buen hombre", una apuesta a la bondad esencial en medio de la más descarnada vigilancia y tortura psicológica ejercida en nombre de las ilusiones de verdad absoluta que representan tantas veces las ideologías.
https://www.jornada.com.mx/2007/06/03/sem-jose.html
El enlace que antecede permite acceder a todo el argumento de la película, y también a las entrelíneas de sus motivaciones, y de su contexto histórico y social. Es redundante volver a dar la misma información, por lo que sólo transcribiré lo que me hace falta para describir cómo impactó en mí, cuál fue mi conmoción.
En dicho enlace José María Pérez Gay nos cuenta cómo la "Sonata para un hombre bueno", es un regalo que se le hace a uno de los protagonistas por su cumpleaños, y cuyo título alude a la obra de teatro de Brecht El hombre bueno de Sezuan, historia de una prostituta que, aceptando todas las adversidades, se empeñó siempre en ayudar a los otros.
El capitán Weisler, a su vez, aparecerá en una escena leyendo un fragmento de este poema de Brecht que citaré al final en forma completa
"Si las nubes no hubieran estado allí.
Yo habría olvidado aquel beso hace mucho tiempo.
Las nubes las recuerdo todavía y las recordaré siempre,
Eran tan blancas y venían desde muy lejos."
Bien: en medio de esa situación de violencia sutil y eficaz del espionaje disfrazado de bondad que instaló el stalinismo en todas sus versiones, en medio de esa ilusión de servir al bien a través de medios atroces, en los que la tortura se ejerce muchísimo más en el plano de lo psicológico y emocional que en el de lo físico; en un contexto de crueldad legitimada, en que el libre albedrío, la posibilidad de expresar las propias ideas equivalía directamente a que los ciudadanos fueran despojados del ejercicio de sus pasiones, de sus vocaciones y talentos, degradados y mutilados donde más dolía... ahí, justo ahí, viene a situarse esta historia.
El protagonista en un momento de la película, dice: "Estoy pensando en lo que Lenin dijo de la “Appassionata” de Beethoven: “Si sigo escuchándola, no podría acabar la revolución.” ¿Puede alguien que haya escuchado esta música... que la haya escuchado de verdad... continuar siendo una mala persona?"
Y esto me remite a una de mis citas preferidas de nuestro Leopoldo Marechal cuando dice: "¿qué ideólogos político-sociales, divididos a muerte, no se reconciliarían, fuera de su litigante asignatura en una sonata de Beethoven, en un cuadro de Hieronimus Bosch o en un drama de Shakespeare? Elbiamor, el arte se parece mucho a un Paraíso donde los hombres logran unirse "por arriba" si están divididos "por abajo". Y te juro por el bonete de Pitágoras que si los hombres, en su locura niveladora, llegasen a destruir tan saludable jerarquía, destruirán también ese paraíso de la unificación posible, y se irán todos juntos al infierno". tomado de "Cuaderno de navegación", (Cap VIII, La torre de marfil asediada)
viernes, 1 de octubre de 2021
Cine y poesía: Hannah Arendt
(inspirado en la película homónima)
Fumar como respirar,
respirar como pensar,
pensar como sentir...
Pensar y sentir
desde el mismo sitio del cuerpo.
Respirar.
Inhalar y exhalar prana,
alimento para el pensar.
Fumo,
luego pienso
luego amo
luego siento...
Porque antes amé y sentí,
pero pensar me requiere estar tirada en una cama
mirando hacia arribadentro,
y fumar/respirar para pensar/respirar
en un mundo tóxicointoxicado.
Fumopiensoduelo:
me sosiego sin embargo
ante la evidencia
de que todos somos lo mismo sin serlo
¿todos somos humanos en fauna,
en mordida?
Porque pensar como vivir
requiere ese coraje
de amar lo pensado con el cuerpo,
y no lo ven:
prefieren las cómodas recetas,
como si yo militara en política
cuando lo único que hago es tratar de ver
cómo por qué de qué manera se puede revivir
cuando se encargan de convertir en cementerios
las semillas del sueño que habitan en el cortex,
en el hipotálamo,
como en el corazón del mundo...
Cuando por lo único que milito
es por el ser humano íntegro,
aún por el que me deshace en este mismo momento.
Fumar como amar requiere tiempo...
papas peladas de a dos.
Requiere llorar porque mi esposo está enfermo
mientras investigo
y no dejo que otro ocupe mi lugar junto a su cama,
junto a su alma.
Yo estoy aquí: revisada, etiquetada
por burócratas del amor
que enfrían el pensamiento
como si fuera una fuerza ajena a las entrañas.
Yo estoy aquí,
afirmándome en algo que va más allá de mí misma,
algo que me funda,
que me induce a continuar un camino:
esa alameda que entreveo desde mi ensueño,
los ojos más allá de todo...
Aunque me roce la caricia perversa
de la falacia original
martes, 28 de septiembre de 2021
Cine y poesía: 184 días ( "Tierra de ángeles" revisitada)
Temblar
Bailar y agitarse
Insultar
Hacer caer los crucifijos
Des reprimir la ira
Las broncas
La represión
La emoción
El deseo
La fe
La confianza en sí
Decir la verdad
Confesar algo oculto
Para que en el canto haya
Armonía
No desear el mal
A quien hizo lo que pudo
Salirse del círculo de la podredumbre
Y atreverse
Girar las caderas locamente
Aceptar que un loco forme parte
De lo que hacen los normales
Buscar el sonido dentro de sí
El sonido del alma en el cuerpo
El sonido de todos a la vez
Amoldándose al conjunto
58 segundos de
Gracia
La música
Cómo saber si uno quiere a alguien
Que además le gusta
Desnudarse
Mirarse llorar
Bailar y comer
Reír
Acostarse todos juntos
Formando una almohada infinita
Un cobijo de manos
Un refugio de cuerpos
La canción de Gabriela
Gabriela anagrama casi de Alegría
Gabriela
Fe
Arrojarse de un trampolín
Y encontrar al niño
Intacto entre el trigo
La muerte no existe
https://ok.ru/video/2842952207083
viernes, 23 de abril de 2021
CEREZOS EN FLOR
CEREZOS EN FLOR
(inspirado en la película homónima)
I
el hombre
se pasea por la orilla del mar
con el saco azul de ella puesto
siente que la saca a pasear
por fin
como ella hubiera deseado
Sí. La saca a pasear
no porque no hayan paseado juntos,
sino porque es él el que toma el timón
de desear regalarse
la felicidad de ella
II
ahora
él está en duelo
ella se fue a un lugar sin retorno
donde no la verá más
Él se va de putas
En Japón
son muy consideradas
lo enjabonan todo
hasta que le tocan el anillo de oro
y él rompe en llanto
y no vuelve
III
mira las fotos
el butoh
la cara pintada de blanco
a hurtadillas
de la vida cotidiana
de las comidas bien organizadas
de la oficina
las tardes compartidas
había otra ella
que él no conocía
porque no quiso entrar ahí
donde vivía su alma
IV
ella soñaba un viaje a Japón
para ver a su hijo mayor
y para hundirse en la magia del butoh
pero él amaba tanto lo de siempre
y ella lo amaba tanto a él
que la muerte blanca la sorprendió
de golpe
V
él indaga el formato
de las cosas que ella amaba
empieza a cocinar
sus platos preferidos
en particular
unos arrollados de col
que duermen juntitos siempre
en la bandeja
VI
Tu es casi una niña
ese es su nombre
casi parece un chiste
Tu baila butoh en el parque
y duerme al aire libre
él comienza a entrar por su ternura
a la tierra de sombras
en que se danza con los vivos
y con los muertos
VII
se ponía rígido cada vez
que ella intentaba
que él moviera los brazos a la par
ahora
suavemente mueve sus manos
hasta observar la sombra que proyectan
llena de vida
VIII
está enfermo
se hunde
y sin embargo
se dirigen al cerro más tímido
al Fuji
a morir de repente
como en un haiku
XIX
ella está en él
él vestido de ella
con un kimono con flores
danza
danza mirando al cerro
lo mejor que puede
y sus manos se engarzan con las suyas
suave
tiernamente
sus rostros
casi al unísono
maquillados
se yerguen
mirando al cielo
luego se desploma y cae
un solo cuerpo
vestido de mujer
sobre la arena
(C. Bakún, 23/4/21)
sábado, 8 de agosto de 2020
"Amour"
ayer me miraba en el espejo
en plena pandemia del año dos mil veinte
después de ver la película Amour de Haneke.
Había visto a las tías en esa mujer vieja
que se iba deconstruyendo en cuerpo y alma
hacia algún sitio infeliz.
Vi a las tías y a mi madre,
el alzheimer y los patetismos
de las mujeres desnudas en los hospitales,
bañadas por asistentes y enfermeras
a las que nada les importa
-o a lo mejor mucho-,
pero ellas, sin destino
solitarias
peinadas a los tirones y escupiendo el alimento…
Y fue entonces cuando me sentí orgullosa de mi alma
porque ella,
la tan sensible alma,
esta vez no gritaba
y no veía más que ternura
en esos cuerpos y esas intemperies
en donde antes había visto horror.
Y me sentí a gusto
y reconfortada
y calentita de mí…
Pero se ve que no somos tanto,
que siempre sobreviene la cuestión de la impermanencia
que nos tira por la borda los mejores estados
o al revés.
Y entonces yo
en la cola del banco tomando frío
aunque me hiciera la contenta
y bailara un poquito en la baldosa,
yo sola en el invierno recibí
en algún agujero no muy bien sellado
el impacto del frío,
de todos los fríos acumulados
de la tanta soledad
de separarse de todos los sentidos
que había tomado la vida en un momento
de separarse de los sueños
que no hallaron el sitio para realizarse
de quedar sola de los que no se dieron cuenta
o da lo mismo
Y entonces se agolparon los huecos en el alma
y les entró el chiflete
e hicieron gripe y susto en las entrañas
y muerte en las pulsiones y qué espanto
hasta que por fin la sopa y el tecito
y un cuidado caliente y los pies en el balde
y sobre todo el agua
con sal, -pahuyentar a las sombras-,
lograron que volviera.
Y al mirarme al espejo
en plena pandemia del dos mil veinte
me di cuenta
del borde verde oscuro
que rodea esmeradamente el círculo de mis iris
desde que nací
y luego miré las pupilas pequeñitas
y dentro y fuera del ojo
la sonrisa de cierta picardía
el tono nuevo del decir
y la risa ubicada
muy bien sentadita
en el pupitre de aprender otras cosas.
Y esa nena grandota que goza de la audacia
que no tuvo de niña
que no se va a dejar envolver en la toalla del lamento
se puso de pie con las patas mojadas
y echó a andar